Con máquinas de coser propias y otras cedidas
VALENCIA, 25 ABR. (AVAN).- Religiosas del instituto de vida consagrada Iesu Communio están confeccionando en su convento de Godella (Valencia) cientos de batas y gorros sanitarios para su utilización contra el COVID-19 por personal tanto de asilos de ancianos como de hospitales y centros de salud, en su mayoría de Valencia.
Las hermanas comenzaron esta actividad al inicio de la pandemia, utilizando para ello “varias máquinas de coser propias a las que se fueron sumando otras máquinas cedidas por vecinas de Godella y de amigos”, han explicado desde el convento. La confección de las batas y gorros se realiza con distintos materiales plásticos “donados generosamente por varias empresas que han querido colaborar”.
En el trabajo participan a diario “un gran número de las setenta religiosas que integran la comunidad de Godella, y se unen a ellas varias más en todos los tiempos libres”.
Las batas y gorros “se entregan gratuitamente a petición de sanitarios de varios hospitales y centros de salud de Valencia y alrededores, así como a varias residencias de ancianos como las de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados”, han precisado.
La vida en el convento se centra más ahora en una vida contemplativa de oración y trabajo. Su misión de acogida de grupos en los locutorios y celebraciones litúrgicas se ha interrumpido temporalmente. Desde que se establecieron en Godella, más de 10.000 personas han participado en encuentros con las hermanas, que reciben “a quienes llaman a su puerta queriendo compartir su experiencia de vida, orar, crecer en la fe y en el amor a Cristo”.
También ha cesado temporalmente la venta de sus productos de repostería artesanal y flores preservadas en su tienda física en Godella por lo que “se ha hecho especialmente necesario potenciar la venta a través de la tienda online”, han indicado.
Iesu Communio, erigido en 2010 en la diócesis de Burgos como instituto religioso femenino de Derecho Pontificio, escogió en 2017 Valencia para abrir su primera fundación fuera de la diócesis burgalesa, y se estableció en el antiguo convento de las Salesas en Godella.