Preside una eucaristía en la Basílica de la Virgen con motivo del Día de la Salud Mental
Coincidiendo con la festividad de Santo Tomás de Villanueva
Fotografía: Samuel Martos
El Arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent, ha presidido hoy, jueves, una eucaristía en la Basílica de la Virgen de los Desamparados, con motivo del Día de la Salud Mental, que se conmemora cada 10 de octubre, festividad de Santo Tomás de Villanueva, que fue arzobispo de Valencia entre 1544 y 1555.
La celebración ha sido organizada por la Fundación Mare de Déu dels Innocents i Desamparats (MAIDES), dedicada a la atención de personas con enfermedad mental y grave y en riesgo de exclusión social, que lleva 16 años trabajando para dignificar la vida de los que sufren esta enfermedad.
Durante su homilía, el Arzobispo ha agradecido a MAIDES “su preocupación, la acogida, el acompañamiento y el esfuerzo que realiza en su labor diaria con las personas que sufren este tipo de enfermedad”, y ha destacado que su trabajo “es un testimonio de auténtico amor y de auténtica caridad cristiana porque ponen a la persona en el centro de su actividad”.
Monseñor Benavent ha recordado la figura de Santo Tomás de Villanueva, “un pastor en cuya vida se conjugaron de una manera perfecta la enseñanza de la doctrina y la caridad y el amor a los pobres”. En este sentido ha señalado que “la caridad es el camino que lleva a la vida eterna. En la vida cristiana estas dos cosas no se pueden separar, Santo Tomás nos enseñó cuál es el camino para llegar a la santidad, un camino que no basta con saberlo, si no que también hay que recorrerlo”.
“Solo quien vive en la caridad está recorriendo ese camino, con amor a las personas más pobres, más necesitadas, con misericordia y gestos de esperanza”. “La Iglesia no puede solucionar todos los problemas de nuestro mundo, pero no debe haber ninguna pobreza donde no haya una presencia cristiana”, ha señalado.
Una presencia que realiza la Fundación MAIDES en la atención personas con enfermedad mental grave y en riesgo de exclusión, recogiendo al inspiración inicial de la Archicofradía de la Virgen de los Desamparados, impulsada por el padre Jofré hace más de 600 años para “hacer presente la caridad cristiana a aquellas personas que más necesitaban de la protección de la sociedad y del amor a sus hermanos”.
A la eucaristía han asistido usuarios de la fundación, junto con trabajadores, voluntarios y miembros del patronato de la entidad, que constituye una de las obras sociales de la Basílica de la Virgen, junto a Villa Teresita y Provida
Por su parte, el presidente de la Fundación MAIDES, Marcos Pascual, ha señalado que “hoy es un día muy importante porque conmemoramos el Día de la Salud Mental y para la fundación MAIDES no es un día cualquiera, es un día que viene a recordarnos la importancia de estar atentos a estas personas que nos necesitan, que esperan nuestra ayuda y nuestra comprensión”. Y sin duda, ha añadido, “es un día muy importante sobre todo para nuestros usuarios, ya que sirve para concienciar cada día más sobre la necesidad de prestarles nuestra atención y que sea una atención amorosa”.
(Fotografía: Samuel Martos)
MAIDES, pionera en la atención de la salud mental
La Fundación, impulsora de programas pioneros en la atención de Salud Mental en nuestra diócesis, tiene como misión ejercer la caridad a través de la atención integral a personas con una enfermedad mental crónica, prestando especial atención a aquellas que se encuentran en situación de pobreza y exclusión social.
Dieciséis años después, MAIDES se ha convertido en una entidad pionera “en el cuidado y atención de estas personas, que se sienten abandonadas por la sociedad y por las que la Fundación trabaja para que sean reconocidas en toda su dignidad humana, proporcionándoles acogida, acompañamiento y apoyo para que estas personas consigan rehacer su vida”.
Además de las viviendas tuteladas, en las que atiende a hombres y mujeres durante las 24 horas del día, MAIDES cuenta con más programas de atención, entre ellos el Programa de Acompañamiento Domiciliario (PAD), que consiste en unidades de convivencia en las que dos o tres personas viven de forma autónoma con la supervisión semanal de un equipo de educadores y la ayuda de voluntarios. Otro programa es el PASC, centrado en la Atención y Sensibilización Comunitaria, que tiene como objetivo crear una red social de apoyo a personas que viven en domicilios particulares y se sienten superadas en ocasiones por su enfermedad.
Camino de superación y teatro inclusivo
Entre las próximas actividades programadas por la Fundación MAIDES se encuentra la inauguración de una exposición fotográfica sobre el Camino de Santiago, realizado el pasado mes de agosto por usuarios de la entidad, junto a voluntarios y trabajadores. Los peregrinos recorrieron el tramo comprendido entre Sarria y Santiago de Compostela, con una extensión total de 114 kilómetros.
La muestra, que permanecerá abierta del 14 al 18 de octubre en la Casa de la Cultura de Burjassot, “pretende plasmAr la experiencia de superación que ha sido fruto del esfuerzo y la ilusión de un grupo de senderismo, gracias al apoyo de voluntarios y empresas colaboradoras”, señalan desde la entidad.
Igualmente, MAIDES ha dado un paso más en su representación anual de teatro, ya que el próximo 13 de noviembre el Teatro Talia de Valencia acogerá, a las 19 horas, la escenificación de la obra “Patchwork. Una maraña mental. Un hilo que une. Un tejido vinculador”.
Una obra de teatro que reúne de forma conjunta a usuarios de diferentes entidades valencianas que trabajan con personas con problemas de salud mental grave. Así, la obra ha sido posible gracias a la labor de Albero Artesanos, l’Associació Àmbit, ACOVA, el CRIS Velluters y CRIS Sant Pau, todas ellas entidades, junto a MAIDES, comprometidas con la salud mental.
La iniciativa será presentada oficialmente el próximo miércoles, 16 de octubre, a las 18:30 horas en la Casa de la Cultura de Burjassot
