Pide la participación de todos en esta llamada universal del Papa “para caminar juntos, participando en la misión eclesial de anunciar el Evangelio”
DIOCESIS DE VALENCIA, 14 OCT.- El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, inaugurará este domingo la fase diocesana del Sínodo Universal convocado por el papa Francisco sobre la «sinodalidad, la participación y la misión de la Iglesia», con la celebración de una misa en la Catedral a las doce del mediodía, en la que concelebrará el Consejo episcopal de la diócesis.
Esta fase diocesana, cuya apertura tendrá lugar también este domingo en las diferentes diócesis, después de inaugurarse en Roma el pasado 10 de octubre, se prolongará hasta el próximo mes de abril. El objetivo expresado por el papa Francisco al convocar el Sínodo es el de lograr una “participación auténtica y real de todo el Pueblo de Dios” para afrontar los nuevos retos de la Iglesia porque “no puede haber soluciones viejas a problemas nuevos”, según dijo el Santo Padre.
El Cardenal Cañizares dirige esta semana una carta a la diócesis: sacerdotes, religiosos y fieles cristianos laicos, con motivo del inicio del Sínodo, en la que pide la participación de todos en esta “convocatoria universal, venida del Papa”, porque el Pontífice invita “a toda la Iglesia, a todas las diócesis a un Sínodo universal que muestre a la Iglesia toda, caminando juntos, participando en la misión eclesial de anunciar el Evangelio”.
El Arzobispo expresa, también, que “el Papa quiere consultarnos a todos, incluso a los alejados y, por ello, nos convoca a este Sínodo, que lleve a la Iglesia, en lo sucesivo, a un estilo de sinodalidad, inherente a la naturaleza de comunión que la constituye, en diálogo y participación de todos los fieles”.
Está previsto que este Sínodo siga tres fases: una diocesana —en todas las diócesis del mundo—, otra nacional —en todas las conferencias episcopales—, y la fase final —fase universal.
En la diócesis de Valencia, “coincidiendo más o menos con la aprobación y publicación del Sínodo diocesano y el final del Año jubilar del Santo Cáliz y el final del Congreso diocesano del Laicado, se hará la consulta diocesana a todos, siguiendo un estilo sinodal, consultando a los Consejos diocesanos de Pastoral, del Presbiterio y de Vida Consagrada, y al Colegio de Arciprestes, en la forma concreta que se comunicará en su momento». Por ello, “ruego encarecidamente que participéis y os toméis en serio esta convocatoria, la primera que se hace en la historia de la Iglesia”.
En ese sentido, el cardenal Cañizares asegura- refiriéndose al Sínodo diocesano de Valencia, que “no hay colisión entre nuestro Sínodo diocesano y el universal: uno es local, el otro de ámbito mundial eclesial; uno y otro se plantean qué hay que hacer para evangelizar en este mundo nuestro en que vivimos para que los no creyentes crean, qué hay que hacer para anunciar a Jesucristo hoy. No se sabe si habrá o no un documento final, pero, en todo caso, lo importante es meter o llevar a la Iglesia por caminos de sinodalidad y participación en orden a la misión”, explica.
“Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión”
El tema del Sínodo es “Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión”, tres dimensiones profundamente interrelacionadas, que son los pilares vitales de una Iglesia sinodal, según expresa el canciller secretario del Arzobispado, José Francisco Castelló, que ha sido nombrado por el Arzobispo como persona de enlace con la CEE para los trabajos sinodales.
La novedad de este sínodo “es que si los anteriores tenían lugar por continentes o reunidos los Obispos en Roma, ahora habrá tres fases : una diocesana, otra continental y la fase propiamente universal, y será una escucha universal, de toda la sociedad en general, dentro del ámbito eclesial y también hacia afuera, incluidos los alejados, los no creyentes”.
Y, para ello, “desde Roma se han previsto diez núcleos temáticos con cuestiones para que se abarquen todos los temas: el ecumenismo, el diálogo interreligioso, la misión, el papel de los laicos en la sociedad, en la política y la cultura, la vida consagrada, la eucaristía, la liturgia, etc. Se abre pues, ahora una primera fase de «escucha diocesana» sobre una serie de preguntas propuestas por el Sínodo para ser tratadas en diálogo y discernimiento en parroquias, movimientos laicales, escuelas y universidades, congregaciones religiosas, comunidades cristianas de barrio, grupos de acción social, movimientos ecuménicos e interreligiosos y otros grupos.
Todas las diócesis han sido invitadas a entregar sus respuestas a esas preguntas a la propia Conferencia Episcopal, para poder recoger las ideas antes de la fecha límite de abril de 2022. De este modo, las Conferencias episcopales podrán entregar, a su vez, una síntesis al Sínodo de los Obispos. Este material será sintetizado y utilizado como base para la elaboración de dos documentos de trabajo (conocidos como Instrumentum Laboris) para la Asamblea del Sínodo de los Obispos en octubre de 2023.
Primera reunión, en Valencia, el lunes 18 de octubre
Una vez abierta la fase diocesana, está previsto que el lunes, 18 de octubre, se celebre la primera reunión presidida por el Arzobispo, del Consejo Episcopal y el Consejo Presbiteral, que tendrán que ir abordando ya los temas del Sínodo.
A partir de ahí, las cuestiones que se plantean para el trabajo en esta fase diocesana del Sínodo serán abordadas en cada uno de los organismos diocesanos asesores del Arzobispo, también en el Consejo Diocesano de Pastoral, y el Consejo Diocesano para la Vida Consagrada. Igualmente, en estos trabajos van a tomar parte muy activa también las parroquias.
Así, a través de las reuniones de los arciprestes con los párrocos de sus arciprestazgos se harán llegar las cuestiones objeto de tratamiento en el Sínodo. Para ello se convocarán en cada parroquia sus respectivos consejos pastorales parroquiales.Asimismo, el Congreso Diocesano de Laicos, previsto para los días 22 y 23 de noviembre, con el lema “Caminando juntos hacia un renovado Pentecostés”, con la participación prevista de más de mil congresistas, tendrá, entre sus cometidos, abordar determinados aspectos concretos de este XVI Sínodo de Obispos en su fase diocesana.
La intención es que, como indica el Papa, en la configuración de la Iglesia ante los retos de futuro puedan “participar todos” y ahí se implicarán también Pastoral Universitaria, y la vicaría episcopal para las Relaciones Culturales.También en este Sínodo se recogerán aportaciones del ámbito de la caridad a través de entidades como Cáritas Diocesana y las Cáritas parroquiales, pero también de Manos Unidas Valencia. Igualmente, para asesorar al Arzobispo en todo el trabajo del Sínodo en esta fase diocesana y elaborar la síntesis final, se mantendrá la Comisión Central del último Sínodo diocesano.“Nosotros como parte de la Iglesia católica y la Iglesia que camina en Valencia estamos en plena comunión con el Papa Francisco y vamos a secundar esta iniciativa del Papa que nos pide a todos que con ilusión, con alegría, participemos en esta llamada del Santo Padre”, expresa Castelló.
Fases del Sínodo
El camino sinodal tiene tres fases fundamentales. La fase diocesana se inició solemnemente el 9 y 10 de octubre del 2021 en Roma y el 17 de octubre siguiente en cada Iglesia particular, y se prolongará en ellas hasta abril de 2022. En una segunda fase, entre septiembre de 2022 y marzo de 2023 tendrán lugar las asambleas regionales y continentales.
Finalmente, en octubre de 2023, tendrá lugar en Roma la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los obispos. Después del Sínodo está prevista la puesta en marcha de las propuestas y conclusiones, lo que implicará nuevamente a las Iglesias particulares.
