VALENCIA, 17 JUL. (AVAN) .- Cáritas Valencia cuenta, en la actualidad, con un total de 24 equipos de empleo repartidos por la diócesis que ayudan a la empleabilidad de personas sin recursos y en riesgo de exclusión social ofreciéndoles herramientas y formación para facilitar su inserción laboral.
Según explica la responsable del programa de acompañamiento al empleo de Cáritas, Lara Franco, “el objetivo es mejorar la empleabilidad de la persona, enseñándole a encontrar su propio puesto de trabajo. No buscamos, por tanto, el empleo sino que enseñamos a buscarlo”.
Los 24 equipos, que forman parte del área de Economía Solidaria de la entidad caritativa, surgen del trabajo de las acogidas en las Cáritas parroquiales, “donde se detectan las necesidades de formación de las personas que acuden en busca de ayuda” y su metodología “es sencilla”.
En primer lugar, “recibimos a los participantes y se les pide toda su documentación relacionada con el ámbito laboral: su currículum, su vida laboral certificados, títulos.” Después, en una entrevista personal, “nos cuentan su experiencia y le asesoramos para mejorar su currículum, cambiar su carta de presentación o ver si pueden realizar alguna formación que mejore su situación”.
Toda la orientación se realiza de forma individual, dependiendo de cada caso. “Tenemos perfiles muy diversos, personas que no saben leer ni escribir o que tienen, por contra, estudios universitarios y unos objetivos laborales muy concretos”, asegura.
Así que, “según cada caso, se les ayuda a solicitar recursos, se le ofrecen cursos de formación, clases de castellano o valenciano, se les ayuda con el ordenador si no saben, se les dan pautas de cómo afrontar una entrevista de trabajo o se les orienta en los procesos de homologación de titulaciones”.
Además, desde los equipos de empleo se puede remitir a los usuarios a los cursos con prácticas que organiza Cáritas Diocesana, como los de empleo doméstico, cocina, pintura mural, atención socio-sanitaria o manipulación de alimentos, entre otros. “Entidades con las que trabajamos, como la Fundación de Hostelería o Xabec, emiten certificados de profesionalidad”, apunta Lara Franco.
“Fent Llavor”, uno de los equipos de Cáritas, en Mislata
Uno de los 24 equipos de empleo de Cáritas es “Fent Llavor”, de la Cáritas Interparroquial de Mislata. Su responsable, Mercedes Blat, explica que “el trabajo se hace de forma personalizada, porque según la situación de cada usuario sus necesidades son diferentes”.
“Intentamos inculcar hábitos y habilidades como la puntualidad, organización, seriedad, responsabilidad, buena presencia y aseo personal, constancia y seguimiento”, destaca.
Entre las personas que han conseguido una inserción laboral gracias a este programa de Cáritas figura Carolina Díaz, que llegó de Venezuela hace un año y medio.
Carolina tiene 41 años, es licenciada en Estudios Internacionales y trabajaba en Venezuela en la Administración Pública. Vino a Valencia , afirma, “huyendo de la miseria y la muerte”, con su marido Juan Carlos y sus dos hijos, de 9 y 11 años.
“En Venezuela teníamos mucha relación con los salesianos, somos gente de Iglesia” y, una vez en Valencia, se acercaron a la parroquia de Nuestra Señora de los Ángeles de Mislata “buscando orientación para adaptarnos e insertarnos lo antes posible”, asegura.
“Lo primero fue cubrir las necesidades básicas, pero cuando ya sales de tu país y sabes que no vas a morir, comienza otra lucha, que es el empleo”, explica Carolina que desde hacía 14 años no había actualizado su currículum al tener empleo estable.
“Desde Cáritas les acompañamos durante un proceso largo de tiempo, no nos desvinculamos en cuanto el usuario encuentra un empleo, si no que estamos pendientes de sus necesidades y de su situación”, explica Mercedes Blat, que asegura que en el tiempo que lleva en marcha el proyecto “Fent Llavor”, apenas un año, ya se ha trabajado de forma individualizada con una decena de personas.
1.218 personas lograron una inserción laboral en 2019, a través de Cáritas
El pasado año, Cáritas Valencia acompañó a más de 3.808 personas, en la búsqueda de empleo en la diócesis de Valencia, de las cuales, un total de 1.218 lograron una inserción laboral.
Según las cifras de la EPA, en la Comunitat Valenciana a finales de marzo de 2020 había 348.700 personas en situación de desempleo, pero a ellas hay que añadir todas aquellas que se han sumado a partir de abril, y las que no están en este registro por formar parte de los ERTE generados por la situación actual; las que se encuentran en situación irregular o quienes no forman parte de las listas de demandantes de empleo por haber desistido de la búsqueda, entre otras.
Además, a lo largo de 2019, Cáritas Valencia realizó diversas acciones en materia de formación para el empleo. En este sentido, desarrolló un total de 134 acciones formativas, 83 cursos y 51 talleres prelaborales, en los que participaron 1325 personas.
Entre otros se realizaron cursos de geriatría, atención sociosanitaria a personas dependientes en domicilio o en instituciones sociales, cocina doméstica, auxiliar de cocina, empleo doméstico, iniciación al mantenimiento de hogares, manipulador de alimentos, actividades auxiliares de almacén, peón industrial, limpieza de grandes superficies, costura, pintura mural, mecánica de bicis. También se realizaron talleres prelaborales para facilitar a las personas el acceso a un empleo.
(Fotos: A. Sáiz/AVAN)
Pie de foto: Mercedes Blat (al fondo) atiende a Carolina Díaz en la sede del proyecto Fent Llavor, cuyos locales están ubicados en la misma calleque la parroquia de Nuestra Señora de Los Ángeles, de Mislata.